Tener un buen historial crediticio es básico para la salud de tus finanzas. Esto se logra pagando a tiempo tus tarjetas de crédito, la mensualidad de tu auto, o cubriendo puntualmente el pago de cualquier otro financiamiento u obligación que puedas tener.
De esta manera logras que tu carta de presentación se mantenga impecable y que no tengas ningún problema a la hora de solicitar algún tipo de crédito.
Tu calificación crediticia
Cuando solicitas un crédito, los prestamistas determinan tu riesgo crediticio examinando tu calificación crediticia.
Existen agencias de informes crediticios, las cuales cuentan con datos crediticios tuyos que se utilizan para calcular tu calificación. Esta información incluye tu historial de pagos, lo que debes, la antigüedad de tu historial crediticio y la cantidad de cuentas de crédito abiertas recientemente.
Tu calificación orienta a los prestamistas sobre tu riesgo crediticio. Las calificaciones otorgadas por las agencias de informes crediticios varían de país en país. Sin embargo, cuanto más alta sea tu calificación, menor será el riesgo que perciben los prestamistas y por ende mayor posibilidad de que te brinden un crédito.
Señales de alerta
Al manejar tus finanzas presta atención a las señales que te notifican sobre problemas de crédito, o bien, sobre posibles problemas de este tipo.
A continuación te presentamos algunas alertas que debes tener presente para evitar dificultades que puedan incidir en tu historial crediticio: