Los riesgos son las posibilidades de que eventos o situaciones inesperadas que no podemos predecir, efectivamente sucedan. La pérdida súbita del empleo, la enfermedad de algún miembro de la familia, un incendio en nuestra casa o el robo de nuestro auto son ejemplos de riesgos comunes a los cuales nos vemos expuestos, y que tienen la capacidad de afectar negativamente nuestra estabilidad, nuestro patrimonio y el bienestar de nuestra familia.
Todas las personas tienen percepciones diferentes sobre los riesgos, y en esa medida emprenden acciones para protegerse frente a ellos y minimizar sus consecuencias negativas.
Existen diversos mecanismos para protegerse de los riesgos a los cuales estamos expuestos. Uno de ellos es el ahorro, estableciendo un fondo de emergencias que nos permita hacer uso del dinero en caso de requerirlo para alguna eventualidad.
Otra forma es el crédito, aunque éste puede resultar muy costoso e implica un compromiso financiero a futuro para obtener recursos en el presente.
Y finalmente existen los seguros, los cuáles son ofrecidos a través de las aseguradoras o compañías de seguros.
¿Qué es un seguro?
El seguro es un instrumento financiero que permite a las personas, a las empresas y al Estado transferir sus riesgos a un tercero -persona o compañía-, mediante el pago de una suma de dinero.
Así, en caso de que sucedan los hechos cubiertos en el contrato de seguro, dicho tercero debe pagar al asegurado una indemnización o una suma asegurada, o debe prestarle de un servicio, de acuerdo con las condiciones de la póliza.
De esta forma, los seguros contribuyen a que las personas se recuperen de los efectos producidos por la situación inesperada, y no se vea comprometida su calidad de vida ni la de su familia.
ABC de los Seguros
A continuación, encontrarás información clave que te ayudará a comprender mejor cómo funcionan los seguros.
Las Aseguradoras
Las aseguradoras o compañías de seguros son instituciones financieras especializadas en ofrecer diferentes tipos de seguros para proteger a las personas y/o empresas de los riesgos que puedan enfrentar ellas mismas, sus bienes o su patrimonio.
Por el pago de una prima, que es el valor del seguro, el asegurado transfiere el riesgo a la compañía de seguros. En caso de ocurrencia de un siniestro, la aseguradora deberá pagar una indemnización, el valor asegurado, o en ciertos casos prestar un servicio.